http://dx.doi.org/10.35381/e.k.v5i1.1822

 

Uso de estrategias con sonidos onomatopéyicos para la estimulación del lenguaje en educación inicial

 

Use of strategies with onomatopoeic sounds for language stimulation in early childhood education

 

 

 

 

Tania Patricia Luque-Sánchez

tluque8833@utm.edu.ec

Universidad Técnica de Manabí, Portoviejo, Manabí

Ecuador

https://orcid.org/0000-0002-0326-6328

 

Letty Araceli Delgado-Cedeño

letty.delgado@utm.edu.ec

Universidad Técnica de Manabí, Portoviejo, Manabí

Ecuador

https://orcid.org/0000-0002-3034-1282

 

 

 

 

 

 

 

Recibido: 15 de febrero 2022

Revisado: 10 de marzo 2022

Aprobado: 15 de mayo 2022

Publicado: 15 de junio 2022

 

 

 

 

 

RESUMEN

Esta investigación tuvo como objetivo primordial emplear una serie de estrategias con sonidos onomatopéyicos para la estimulación del lenguaje oral en los estudiantes de educación inicial. La investigación es no experimental, descriptiva y con enfoque cuantitativo, cuyo método consistió en un análisis estadístico que permitió a las investigadoras recopilar la información necesaria en relación al desempeño docente y al estímulo del lenguaje con sonidos onomatopéyicos en los aprendices, lo cual se llevó a cabo mediante una ficha de observación y una entrevista a la docente, utilizando preguntas cerradas. Como resultado, se precisó que los estudiantes no tienen un lenguaje bien desarrollado y la docente no emplea una guía didáctica basada en sonidos onomatopéyicos que permita orientarla para aplicar las estrategias más idóneas en beneficio del lenguaje. Por tal motivo, se recomienda diseñar una guía didáctica basada en estrategias con sonidos onomatopéyicos para el correcto desarrollo del lenguaje de los estudiantes.

 

Descriptores: Educación; desarrollo del lenguaje; comportamiento lingüístico. (Tesauro UNESCO).

 

 

 
ABSTRACT
The main objective of this research was based on using a series of strategies with onomatopoeic sound for the stimulation of oral language in initial education students. The research is non-experimental, descriptive and with a quantitative approach, whose method consisted of a statistical analysis that allowed the researchers to collect the necessary information in relation to the teaching performance and learners’ stimulation of language with onomatopoeic sounds. It was carried out through an observation sheet and an interview with the teacher, using closed questions. As a result, it was noticed that the students do not have a well-developed language and the teacher does not use a teaching guide based on onomatopoeic sounds that allows her to apply the most suitable strategies for the language benefit. In consequence, it is recommended to design a didactic guide based on strategies with onomatopoeic sounds for the correct development of the students' language. 

 

Descriptors: Education; language development, language behaviour. (UNESCO Thesaurus).

 

INTRODUCCIÓN 

La presente investigación se origina en la escuela “Lorenzo Luzuriaga” del cantón Portoviejo y tiene por finalidad emplear una serie de estrategias con sonidos onomatopéyicos para la estimulación del lenguaje oral en los estudiantes de educación inicial, específicamente, un grupo de 3-4 años.

Es menester señalar que cuando se habla de comunicación se hace referencia a la vida humana, por ello, se considera que comunicar es vivir, es sacar algo de lo más íntimo del ser hacia afuera, de tal manera que “la comunicación es un proceso por el cual el ser humano puede realizar un intercambio de información con una o más personas” (Pérez et al., 2018, p.64).

El lenguaje es una forma peculiar de conocimiento de los objetos y fenómenos de la realidad y, a la vez, un reflejo de dicha realidad que se propicia por medio de la lengua natal (Delgado et al., 2017, p.27). Al lenguaje oral se le considera como aquella capacidad humana por excelencia, dado que nos diferencia de otras especies y nos concientiza en la parte humana, por tanto, es importante distinguir al ser humano de las demás especies, ya que a través del habla el mismo exterioriza ideas, frases, pensamientos, conocimientos y anhelos que facilitan a otros interiorizarlos y enlazarnos de manera directa unos con otros.

Según (Manzano y Alemany, 2017, p. 312), el lenguaje es un sistema complejo de símbolos tanto fonéticos como escritos que permiten comunicar ideas y pensamientos. Los espacios de lenguaje son decisivos, pues tiene la posibilidad de organizar mundos artificiales donde el niño puede desenvolverse de manera natural y enriquecedora.

En este sentido, el lenguaje infantil se inicia con un período prelingüístico donde el menor produce cortos balbuceos que con el tiempo se convertirán en expresiones comunicativas así como sonoras para poder conectarse con su exterior (Coello, 2021, p.311). Es importante mencionar que el lenguaje de los niños en sus primeros años de vida, se desarrolla principalmente dentro del entorno en donde se desenvuelve, ya que este se encuentra ligado con la familia, la escuela y con ambientes en los que incurre en su diario vivir. No obstante, para abarcar la importancia del lenguaje, a continuación se detallan las teorías a las que se hace relación.

Para (Dastpak et al., 2017, p. 232), Piaget describe el desarrollo general del lenguaje como el resultado de la interacción del niño con el entorno y también con la interacción de la capacidad cognitivo-perceptiva y la experiencia del lenguaje. De este modo, lo que los niños aprenden sobre el lenguaje está determinado por lo que aprenden del entorno.

Asimismo, (Dastpak et al., 2017, p. 234) indica que Vygotsky relacionaba el desarrollo del pensamiento con el desarrollo del lenguaje. Es decir, el desarrollo intelectual del niño o la interiorización de conocimientos y herramientas de pensamiento que existen en la periferia del niño, juegan un papel significativo.

De acuerdo con lo expresado por Piaget, se puede manifestar que los niños desarrollan su lenguaje durante su proceso de crecimiento de acuerdo al entorno que les rodea, generando así conocimientos que les van a permitir expresarse con más facilidad, puesto que el entorno es el ente principal en donde el niño se desenvuelve y esto permite un aprendizaje y un desarrollo del lenguaje más significativo, además de que podrán expresarse de una manera más espontánea en cada una de sus actividades cotidianas.

El lenguaje infantil se desarrolla inicialmente a partir de la manifestación oral de sonidos como el llanto, la risa y la sonrisa. Estas manifestaciones son expresadas, inicialmente, sin intencionalidad concreta y, posteriormente, se van nutriendo de significado gracias al proceso de articulación formado entre las diversas emisiones sonoras hasta convertirse en expresiones lingüísticas ligadas a su cotidianidad; de esta forma, se constituyen en una manera natural de expresión socialmente aprendida en relación con otros seres humanos (Ospina y Gallego, 2014, p.100).

“El desarrollo del lenguaje se inicia antes del nacimiento e incorpora a la familia y todos los agentes educativos del contexto social. Sin embargo, las fallas en el proceso de estimulación y aprendizaje desde edades tempranas generan dificultades que pueden estar asociadas o no a otras necesidades educativas especiales.” (Morán, et. al, 2017, p.193). En definitiva, el lenguaje apoya el desarrollo cognitivo del niño mediante situaciones significativas y este, a su vez, propicia la adquisición de nuevos conocimientos, logrando que los niños puedan expresarse desde tempranas edades de una manera más clara y oportuna ante las necesidades que conlleva el día a día.

La dificultad que motivó a realizar este proceso de investigación es el limitado lenguaje que existe en los estudiantes de educación inicial, una situación que se muestra en casi todas las instituciones educativas y que el docente evidencia en su diaria labor educacional, por tanto, si no existe estimulación y herramientas educativas que faciliten la enseñanza  y la oportuna intervención en el aula, provocará que el estudiante no pueda desarrollar sus habilidades lingüísticas, produciendo serios problemas en su comunicación.

A nivel mundial, la capacidad de hablar es un principio que separa a las personas de otras especies. El lenguaje verbal permite externalizar ideas, recuerdos, conocimientos y deseos así como la internalización simultánea, pero existen factores que dificultan que el estudiante tenga la oportunidad de entrar en contacto directo con las demás personas y el mundo exterior que les rodea, lo cual requiere de gran atención. Con bases a estas necesidades, los especialistas toman en cuenta todas las complicaciones que surgen en el proceso de adquisición del habla y todo el mecanismo que debe introducirse para controlarlo. 

En la lengua oral la prosodia y sobre todo los elementos paralingüísticos ligados a la voz, es decir, «al modo de hablar» (entonación, énfasis, ritmo, timbre, velocidad, pausas, mímica, gestos) son tan relevantes como lo puede ser, en el texto escrito, el tipo de material sobre el que se escribe, el formato, el carácter, etc. (Salaya y Morales, 2017, p. 20).

En Ecuador, hay una gran cantidad de estudiantes con dificultades en el lenguaje que les causa una deficiente expresión, mala comunicación y poco entendimiento entre el estudiante y el docente, lo que origina bajos niveles de comprensión dentro del aula.

En Manabí, pero principalmente en el cantón Portoviejo, los niños de 3 a 4 años que cursan el nivel inicial presentan dificultades al comunicarse y expresar sus necesidades, situación que les impide poder desenvolverse de una manera óptima. Por esta razón, fortalecer esta habilidad durante los primeros años escolares donde el niño adquiere un mayor dominio lingüístico se considera una prioridad para los docentes.

No obstante, nuestra familiaridad con el lenguaje, cual sea su naturaleza, sigue siendo una cuestión altamente controvertida (Scotto, 2020, p.4) El lenguaje es una cualidad del ser humano que  ha generado varias teorías sobre el origen y evolución del mismo, donde hasta el momento se discute el cómo, cuándo y dónde surgió. El lenguaje evoluciona y trae consigo un tema muy importante como es la onomatopeya y aunque muchos autores convergen acerca de la importancia de estas palabras, en la actualidad, ocupan un lugar importante para el desarrollo oral de los niños de educación inicial.

La expresión verbal es una de las maneras en las que el ser humano puede comunicarse oralmente con los demás, esto le permite expresar sentimientos y pensamientos. De este modo, se aprende de forma natural siendo el entorno familiar el eje central importante, debido a que el niño aprende por imitación. (Yépez & Padilla, 2021, p.2).

 

Estudio Comparativo con otros trabajos relacionados

Dos estudios relacionados con este trabajo de investigación son los realizados en la Universidad Técnica de Ambato por Hoyos (2015), la misma que realiza una investigación sobre el tema: “Las onomatopeyas y su incidencia en el lenguaje oral de los niños y niñas de 4 a 5 años de los paralelos “A” y “B” de la Unidad Educativa “Francisco Flor – Gustavo Egüez” del cantón Ambato de la provincia de Tungurahua”, quién propone en su trabajo una guía didáctica llamada “Un mundo creativo con onomatopeyas para mejorar el lenguaje oral”, y el otro realizado por la Lic. Piedad Pazmiño (2018) con el tema: “La onomatopeya en el desarrollo del lenguaje verbal en niños y niñas”, temas que hacen evidente la necesidad de implementar en las aulas de educación inicial, propuestas con actividades diarias que incluyan a las onomatopeyas y que mediante su uso, se logre contribuir a estimular el lenguaje de los infantes de educación inicial.

Esto significa comprender que, desde muy temprana edad, los docentes y padres de familia deben usar actividades basadas en sonidos onomatopéyicos, con el fin de que los niños puedan desarrollar un vocabulario lleno de palabras nuevas, frases y oraciones sencillas acorde a su edad, permitiendo la comunicación con los demás. Por tanto, se requiere de una serie de actividades que el docente necesariamente debe dominar y, de ser idóneo, brindar la capacitación correspondiente para que actualice sus conocimientos y responda apropiadamente a las necesidades lingüísticas de sus estudiantes.

Ahora bien, qué es la onomatopeya, esta consiste en la “formación de una palabra por imitación del sonido de aquello que designa” (Rae, 2022). La onomatopeya es la producción de sonidos, imitados por los seres vivos, estos pueden ser sonidos naturales como (el sonido de la leña cuando arde, la lluvia impactando en la tierra, los truenos, sonido del agua de un arroyo), además sonidos de animales ( el aleteo de las mariposas, el graznido de los patos, el gruñido del leopardo), así también los sonidos de personas como (el latido del corazón, el estornudo, el aplauso, etc.). Todos estos sonidos onomatopéyicos aparecen en la vida cotidiana de todas las personas y se usan para formar el lenguaje. “Las onomatopeyas son el resultado de la interpretación lingüística de sonidos naturales. Esa interpretación está guiada por principios generales fonosimbólicos y se puede realizar en las dos articulaciones del lenguaje” (Moreno, 2016, p. 156).

(Yun, 2016, p. 218) señala que “se conoce como onomatopeya al recurso expresivo universal mediante el cual se crean signos que de una manera más o menos aproximada imitan o están inspirados directamente por la realidad”. La onomatopeya como recurso didáctico es una opción diferente y dinámica enmarcada en el Currículo de Educación Inicial, puesto que conduce a la aplicación de actividades que estimulan la lingüística en los estudiantes. También es de gran utilidad tanto para los niños como para los docentes del nivel inicial, pues se pueden emplear estrategias básicas para su puesta en práctica en la institución y fuera de esta.

La presente investigación posee mucha importancia puesto que aportará las bases para resaltar la importancia de diseñar una guía didáctica basada en la onomatopeya. En tal sentido, se pretende describir un diagnóstico del desempeño docente y estudiantil con el uso de las alternativas onomatopéyicas, ya que según lo explorado a nivel bibliográfico, estas podrían estimular en los estudiantes la adquisición del lenguaje, permitiéndoles mejorar su capacidad de expresarse dentro del aula, del entorno social y del familiar. Igualmente, este estudio puede ser de suma utilidad al docente, por cuanto le va a permitir conocer qué posibles actividades podrían estructurar mejor dentro de un material didáctico para proporcionar al docente las herramientas organizadas y significativas que contribuyan al mejoramiento de la fluidez oral en los estudiantes.

Como consecuencia, se quiere que con la experiencia sencilla que se expone en el presente estudio relacionada con el uso de algunas estrategias con sonido onomatopéyico en el nivel educativo inicial, los docentes se animen a elaborar recursos didácticos que contribuyan a la estimulación del lenguaje en los estudiantes de la escuela “Lorenzo Luzuriaga”.

 

Onomatopeya

“La palabra onomatopeya proviene de las dos palabras griegas onoma, que significa nombre y poiein que significa hacer” (Ortiz, 2020, p.216). También, “una onomatopeya es una palabra formada por imitación de un sonido, ruido o incluso un fenómeno visual, con el que también está vinculada semánticamente” (Salaya y Morales, 2018, p.18). Con base en este criterio, una onomatopeya surge de los sonidos que intentan motivar la expresión lingüística, por cuanto se pretende hacer que la palabra se asemeje a la realidad, siendo esta motivada por las percepciones que se obtienen desde diferentes aspectos vinculados al entorno del niño.

Según Marín (citado por Salaya y Morales 2018, p. 17) expresa que las onomatopeyas son culturales y comunican sentimientos e impresiones emotivas o expresivas. Estos sonidos dependen mucho del contexto, no solo el cultural. Es muy difícil traducirlas y transmitir el sentimiento original porque no solo implican la imitación de un sonido natural, sino de cómo lo interpreta cada hablante y de cómo lo reproduce, puesto que llevan un proceso de formación individual.

Es decir, las onomatopeyas contienen un significado o significancia de relevancia en el desarrollo del lenguaje oral, permitiendo a los niños poder expresar sus pensamientos, sentimientos y emociones y haciendo que estos se sumerjan en un mundo lleno de sonidos que, en muchos de los casos, serán provocados por el mismo.

Las onomatopeyas son imitaciones fonéticas de ruidos, gritos, aullidos y otros sonidos que se quieren transmitir a través del lenguaje hablado, representando caracteres alfabéticos y sonidos ortográficos diseñados para formar una palabra reconocible. Las expresiones de onomatopeyas varían según la región geográfica de uso, pero muchas se han utilizado con frecuencia y se han convertido en parte del lenguaje cotidiano de los pueblos de la región. “Las onomatopeyas, pasan de ser una simple imitación de sonidos a signos lingüísticos con significante y significado” (Moreno, 2016, p. 139). En otras palabras, según el criterio del autor, estos sonidos onomatopéyicos de ser simples logran un significado importante en el lenguaje, pues su uso va a permitir desarrollar la capacidad lingüística de los niños beneficiando su lenguaje oral.

En tal virtud, no hay que olvidar que la onomatopeya, desde el punto de vista del análisis del lenguaje, no es una simple imitación de los ruidos y sonidos de la naturaleza, sino la emisión de diferentes sonidos que producen   un juego divertido, cuyo fin es estimular el lenguaje y fomentar la discriminación auditiva en los niños.

La onomatopeya no consistiría pues en la imitación de sonidos naturales, sino en algo diferente: en la conversión de sonidos naturales a sonidos lingüísticos. No se trataría, pues, de imitar lo más fielmente posible los sonidos de, por ejemplo, ciertos animales, sino de ofrecer una versión lingüística de ellos a través de sonidos que se procesan por el canal estrictamente lingüístico de la percepción humana (Moreno, 2016, p.152).

La realización e imitación de las onomatopeyas son una extraordinaria herramienta para estimular el lenguaje de los niños, porque se ejercitan los órganos fonoarticuladores a manera de juego. De hecho, una de las estrategias didácticas que se utilizan para estimular los procesos del lenguaje y del pensamiento es la onomatopeya, ya que desde su ejecución, se fomentan procesos como la percepción, la atención y la asociación. Además, esta herramienta sirve como medio de apoyo a las funciones simbólicas, conduciendo a los niños a lograr avances significativos en la discriminación auditiva, en la asociación y en la imitación de imágenes. Por consiguiente, es propicia para la expresión, puesto que esto podría ayudar a su experiencia cotidiana y a enriquecer tanto el reconocimiento de sonidos como su representación mental y memoria auditiva, beneficiándolo, de esta manera,  en su diario vivir.

Aunque es cierto que las onomatopeyas son creaciones propias de cada lengua, y, por lo tanto, posee rasgos únicos para cada idioma, no es menos cierto el hecho de que puedan considerarse una ‘categoría universal’ con unas características estructurales, semánticas y pragmáticas comunes a las lenguas del mundo ( Rocha Martínez, 2020, pág. 84).

 

Beneficios del uso de la onomatopeya

“Las onomatopeyas más comunes de la lengua son utilizadas a diario y pueden considerarse parte del léxico más activo de los hablantes y, por extensión, también de los traductores” (Ruiz y Motoki, 2015, p. 58) La onomatopeya tiene varios beneficios para promover el desarrollo del lenguaje en los niños y, al hacerlo, todos los sentidos se involucran promoviendo el lenguaje de forma natural, logrando así la estimulación y articulación de palabras, el mejoramiento de la pronunciación y un mejor control de la respiración que favorece el sistema fonoarticulatorio.

Estos sonidos onomatopéyicos son excelentes para apoyar la adquisición del lenguaje, por tanto, a los 3 y 4 años, se pueden usar para mejorar la fluidez del habla y la pronunciación, así como para promover el desarrollo auditivo y la conciencia vocal.

 

Lenguaje

“El lenguaje es la capacidad que posee el hombre de comunicarse con los demás a través de sonidos a los que otorga un significado”, (Salaya y Morales, 2017, p. 1). “El lenguaje es aquello que el humano es capaz de representar, utilizando las opciones posibles dentro de la lengua y haciéndolo parte de su habla” (Giraldo y Londoño, 2017) “El lenguaje emerge de las profundidades de la génesis humana, con las primeras expansiones del pensamiento y también en el espacio del espíritu humano” (Carvajal, 2016, p. 181), es decir que, por medio del lenguaje, el ser humano puede desarrollar su capacidad de expresión, manifestando por medio de este todo aquello que facilite su comunicación con el medio que le rodea.

Vale resaltar que en la mayoría de las personas, este proceso ocurre principalmente en los primeros cinco años, especialmente, en la adquisición de las formas del lenguaje y contenido.El lenguaje está íntimamente relacionado con las disciplinas académicas, por lo cual ayuda a la construcción del aprendizaje y con ello a la adquisición del conocimiento, así como la puesta en práctica del mismo” ( Ortiz et al., 2020, pág. 452)

El niño desde que nace vive en un contexto verbal con diversas formas de interrelación dentro de un ambiente social con sus particulares manifestaciones de lenguaje. La influencia del entorno social lingüístico hace que el niño y la niña vayan asociando las verbalizaciones a situaciones de contacto para la adquisición del lenguaje (Martínez et al, 2015, p.118).

Además de ser una de las capacidades más extraordinarias de las que está dotado el ser humano, el lenguaje es decisivo en los niños y las niñas, ya que están expuestos a los sonidos del habla desde su nacimiento y de él depende el correcto funcionamiento de otras áreas como la cognitiva, la social, la emocional y los procesos de autorregulación de la conducta. Asimismo, constituye un medio por el cual pensamos y desarrollamos nuestra inteligencia y razonamiento.

En este mismo sentido, el lenguaje es el conjunto de sonidos articulados con que el hombre dice lo que piensa o siente, es un conjunto de señales que dan a entender algo y aunque hay muchos tipos de lenguaje (habla, escritura, señas, visual, braille…), el habla es nuestra principal forma de comunicación. El lenguaje es la realidad primaria, por lo tanto, el hombre es puro lenguaje y toda comprensión que el mismo alcance de sí mismo y del mundo no puede hacerse sino es a través del lenguaje (Bermúdez y García 2016, p. 142-143). Por ende, cabe mencionar que el lenguaje es la capacidad innata del ser humano que permite comunicarse y expresarse dentro del entorno en el cual se desenvuelve facilitando su interacción con la sociedad “la capacidad del humano para hablar es innata, nace con la predisposición para hablar cualquier lengua” (Urgilés, 2016, p. 228).

El niño pasa por varios procesos cuando comienza a desarrollar su lenguaje desde el nacimiento, sin embargo, su desarrollo lingüístico dependerá de la etapa en la que se encuentre, revisaremos dichas etapas por las que pasa el niño mientras adquiere el lenguaje.

A este respecto, la estimulación del lenguaje oral en edades tempranas es muy importante, esto se justifica por las funciones que cumple tal lenguaje en el ser humano que, por un lado, nos sirve para comunicarnos y, por otro, como representación mental del pensamiento.

Para Vygotsky, (citado por Congo et. al., 2018, p.158), el lenguaje es la fuente de unidad de las funciones comunicativas y representativas del entorno, el cual surge con la comunicación prelingüística y no depende únicamente del desarrollo cognitivo, pero sí de la interacción con el medio. El lenguaje se adquiere mediante la relación individuo – entorno, debido a que el niño ya posee las estructuras biológicas necesarias para crear signos de comunicación verbal y poder adaptarse al entorno que le rodea. Además, Vygotsky sostiene que la participación del niño en actividades culturales y con personas más capaces como sus padres, maestros y compañeros ayudan a éste a interiorizar, pensar y resolver problemas de mejor manera.

Según Luria (citado por Congo et. al., 2018, p.158), el lenguaje constituye una de las características principales que separa al género humano de los animales. Por tal motivo, la comunicación requiere de un sistema de signos para llegar al objetivo del entendimiento común. Diversos factores entran en juego cuando se realiza la comunicación por medio del lenguaje, por cuanto se ponen en marcha funciones como la inteligencia y la memoria lingüística. En tal sentido, dominar esta capacidad de comunicación le permite a cada individuo expresar el mensaje que desea transmitir de un modo particular.

En el desarrollo del lenguaje hablado del niño, se evidencian aspectos biológicos fundamentales como la audición y la articulación de la palabra que el niño tiene que reproducir por medio del habla. Para que haya un lenguaje normal hace falta: audición normal, articulación de la palabra normal, función intelectual normal y exposición al lenguaje en los primeros meses de vida.

 Por otra parte, cabe destacar que “lenguaje y educación son dos dimensiones esenciales del ser humano. Sin lenguaje, en el amplio sentido del término, no hay educación y sin educación no hay ser humano” (Urgilés, 2016, p. 222). El lenguaje es una parte clave en el aprendizaje y desarrollo de los niños, puesto que no solo funciona para la comunicación, sino también para la socialización, la humanización y control de la propia conducta. Por lo tanto, es necesario trabajar con estrategias que favorezcan el desarrollo y dominio del mismo dentro de las instituciones educativas y, para ello, se puede emplear la onomatopeya, a fin de estimular el lenguaje desde la infancia.

 

Importancia del lenguaje oral

El desarrollo del lenguaje oral en la etapa de educación inicial tiene máxima importancia, debido a que es el instrumento que permite a niños y niñas alcanzar un aprendizaje escolar satisfactorio, por cuanto en él se fundamentan todos los conocimientos posteriores que el niño y niña va adquiriendo. Para tal fin, los niños se inician con la lecto-escritura que es la base fundamental para todo proceso de enseñanza y aprendizaje.

El lenguaje oral es una de las herramientas más imprescindible para la comunicación, por lo que juega un papel muy importante para el aprendizaje y mucho más en la etapa escolar, pero también es significativo para el futuro tanto personal como profesional de todo ser humano. Como ya se ha explicado con anterioridad, la adquisición de este en el caso de los niños, se da de forma natural, generalmente, los niños adquieren un domino de su propia lengua con el uso del medio lingüístico que lo rodea (Ortiz, et. al. 2020, p.452).

A través de lenguaje oral podemos comunicar ideas, pensamientos y sentimientos a los demás. Es por ello, que, desde un principio,  los niños necesitan de toda atención y estimulación tanto de padres como de docentes, por cuanto son quienes forman y moldean a los niños para que sean entes productivos de la sociedad. Desarrollar el lenguaje oral es tan importante que motiva a llevar a cabo todo tipo de comunicación y permite describir el entorno, expresar deseos, sensaciones y situaciones cotidianas.

Por la relevancia que el lenguaje alcanza en la comunicación humana, su aprendizaje requiere de una enseñanza con un enfoque comunicativo sustentado en formar un usuario efectivo de la lengua. Mediante este proceso se conoce, descubre y se denomina la realidad y se establecen relaciones de pertenencia a diferentes grupos (familia, escuelas, amigos) que regulan su comportamiento a partir de normas sociales establecidas (Méndez, et. al. 2018, p.193).

Cabe mencionar que la estimulación del lenguaje oral en la etapa infantil es vital para los niños y, para ello, se deben aplicar acciones sencillas que no requieran de grandes recursos sino de usar la imaginación para ayudarle en su aprendizaje e integración social.

 

METODOLOGÍA 

Con el fin de cumplir con un proceso sistemático, controlado, organizado y así poder alcanzar los objetivos propuestos con resultados consistentes, este trabajo de investigación adopta principalmente el enfoque cuantitativo, ya que se orientará en la descripción de los hechos, es decir, el diagnóstico de la necesidad que presentan los estudiantes en relación al lenguaje. La investigación es de tipo descriptiva, ya que se explican los hechos tal como suceden.

La población total de esta investigación está conformada por 20 estudiantes y 1 docente de educación inicial de la escuela “Lorenzo Luzuriaga” en edades de 3 a 4 años, la muestra representa el total de la población.

Además, se emplearán estrategias onomatopéyicas atractivas para los niños de educación inicial de la institución educativa donde se ha originado esta investigación. Es de vital importancia mencionar que se trata de actividades sencillas que permiten desarrollar el lenguaje oral en los estudiantes, estimulando y fortaleciendo su capacidad de expresión.

El trabajo y la imitación de la onomatopeya es una herramienta muy útil para estimular el lenguaje en los niños, porque se ejercitan los órganos implicados en el habla mientras se divierten. En ese mismo sentido, la estimulación es una buena opción a considerar, por cuanto da lugar desarrollo de las destrezas lingüísticas del niño en su etapa preescolar.

 

 

RESULTADOS

En relación a la variable onomatopeya se establece que es un tema poco estudiado y, por tanto, los referentes teóricos que fundamentan el contenido aquí expuesto data de una información revisada minuciosamente acerca de teorías, actividades y ejemplos de sonidos onomatopéyicos.

En la variable estimulación del lenguaje se obtuvieron resultados de artículos relacionados que corresponden a autores reconocidos como Jean Piaget y Lev Vygotsky que hacen referencia a la investigación realizada.

El instrumento de la entrevista aplicada estuvo constituido por un cuestionario con  preguntas de opiniones cerradas de las que se tomaron 4, dos por cada variable establecida. Este se elaboró de tal manera que no demandara de mucho tiempo para su contestación y se pudieran obtener respuestas claras y precisas.

Como resultado de la entrevista realizada a la docente de educación inicial, se determinó que no existe utilización de recursos onomatopéyicos para favorecer la estimulación del lenguaje oral en los estudiantes, además no se cuenta con ninguna herramienta didáctica que facilita el correcto desarrollo del lenguaje en el aula de educación inicial.

Por otra parte, mediante una ficha de observación facilitada a los 20 niños quienes constituían los sujetos de estudio, se evidenció que, debido a la incorrecta estimulación del lenguaje y al no existir la aplicación de recursos onomatopéyicos que promovieran el desarrollo del lenguaje, los niños presentan dificultades en la comunicación con los demás miembros de su entorno, propiciando así un desempeño desfavorable de su desenvolvimiento dentro y fuera del aula de clase.

Con base en lo expuesto, se determina que es de suma importancia aplicar actividades donde se incluyan sonidos onomatopéyicos para que los estudiantes puedan desarrollar de forma íntegra y eficaz su lenguaje oral. A continuación, se presenta la información general relacionada con la institución.

 

Tabla 1.

Datos informativos de la institución educativa.

 

Tipo de institución Educativa

Institución

Provincia

Cantón

Título docente

Fiscal

Lorenzo Luzuriaga

Manabí

Portoviejo

Parvularia

 

Elaboración: Los autores

 

 

En esta institución educativa se entrevistó a una docente parvularia quien se mostró con predisposición para facilitar la información requerida, además en el aula de educación inicial, se aplicó una ficha de observación a los 20 estudiantes quienes fueron el objeto de estudio de esta investigación.

 

Resultados de la entrevista realizada a la docente de educación inicial

Los resultados que se presentan a continuación han sido recabados mediante la aplicación del cuestionario aplicado a la docente de educación inicial.

 

Tabla 2

¿Aplica usted una guía didáctica con actividades basadas en sonidos para estimular el lenguaje oral de sus estudiantes?

 

Válidos

Frecuencia

Porcentaje

Porcentaje Válido

Porcentaje Acumulado

No

Total

1

1

2

50,0

50,0

100,0

50,0

50,0

100,0

50,0

100,0

 

Fuente: Entrevista.

En esta tabla 2 se muestra la respuesta a la primera pregunta formulada en la entrevista a la docente, en la cual manifiesta que aplica en un 50% de frecuencia recursos didácticos para estimular el lenguaje de sus estudiantes, lo que significa que debería incrementar su búsqueda de materiales pedagógicos, a fin de facilitar la estimulación del lenguaje en los niños. Cabe acotar que la misma manifestó la no existencia de una guía didáctica con estrategias onomatopéyicas para tomarla como apoyo en sus clases.

 

 

Tabla 3.

¿Utiliza dentro del aula actividades con sonidos onomatopéyicos para propiciar el lenguaje oral de sus estudiantes?

 

Válidos

Frecuencia

Porcentaje

Porcentaje Válido

Porcentaje Acumulado

No

Total

1

1

2

50,0

50,0

100,0

50,0

50,0

100,0

50,0

100,0

 

Fuente: Entrevista.

 

 

En tabla 3 se muestra la respuesta a la pregunta en la cual la docente responde que en el aula sólo ha empleado el recurso de los sonidos onomatopéyicos en un 50%, a fin de estimular el lenguaje de los estudiantes, lo que afecta el desenvolvimiento de los mismos debido a que requieren de mayor práctica.

 

 

 

 

 

Tabla 4

¿Considera usted como docente de educación inicial que la aplicación de una guía didáctica basada en las onomatopeyas ayuda a estimular el lenguaje oral de los estudiantes?

 

Válidos

Frecuencia

Porcentaje

Porcentaje Válido

Porcentaje Acumulado

Si

Total

1

1

2

50,0

50,0

100,0

50,0

50,0

100,0

50,0

100,0

 

Fuente: Entrevista.

 

La tabla 4 muestra la aprobación de la docente acerca de la aplicación de una guía didáctica basada en sonidos onomatopéyicos, por cuanto según su opinión, esta sí podría estimular el lenguaje de los estudiantes, debido a que mediante la utilización de sonidos, el niño puede desarrollar un correcto y fluido lenguaje. El porcentaje válido para esta pregunta es del 50% y para el porcentaje acumulado el 100%.

 

Tabla 5.

¿Estaría usted de acuerdo en aplicar estrategias con sonidos onomatopéyicos plasmados en una guía didáctica como herramienta para favorecer y desarrollar el lenguaje oral de sus estudiantes?

 

Válidos

Frecuencia

Porcentaje

PorcentajeVálido

PorcentajeAcumulado

Si

Total

1

1

2

50,0

50,0

100,0

50,0

50,0

100,0

50,0

100,0

 

Fuente: Entrevista.

La presente tabla muestra la respuesta a la pregunta sobre la predisposición de la maestra acerca de la utilización y aplicación de estrategias con sonidos onomatopéyicos extraídos de una guía didáctica como herramienta para favorecer el lenguaje de los estudiantes, el porcentaje válido corresponde al 50 % y el porcentaje acumulado al 100%.

Según el porcentaje mostrado, la docente reconoce que es de vital importancia utilizar y aplicar una guía didáctica basada en la onomatopeya como una herramienta importante en el desarrollo del lenguaje de los estudiantes de educación inicial.

Los siguientes resultados que se presentan han sido recabados mediante la ficha de observación para la recolección de datos correspondiente al grupo de 20 estudiantes de educación inicial.

 

Tabla 6.

¿Pronuncia el niño claramente las palabras?

 

Válidos

Frecuencia

Porcentaje

Porcentaje Válido

Porcentaje Acumulado

Si

 

No

 

A veces

 

Total

4

 

11

 

5

 

20

20,0

 

55,0

 

25,0

 

100,0

20,0

 

55,0

 

25,0

 

100,0

20,0

 

75,0

 

5,0

 

100,0

 

Fuente: Fichas de observación.

 

La presente tabla muestra los resultados de la observación realizada a los 20 estudiantes en el ítem ¿Pronuncia el niño claramente las palabras? De los cuales 4 niños que equivalen al 20 % expusieron que sí lograron cumplir favorablemente con la actividad, mientras que 11 niños, los cuales equivalen al 75 % no pudieron pronunciar claramente las palabras y 5 niños, los cuales equivalen al 5% de la población de estudio, solo a veces podían pronunciar las palabras que se les mencionaban.

Es importante mencionar que la mitad de la población de estudio no posee un lenguaje claro, por lo tanto, se sugiere aplicar tareas con sonidos onomatopéyicos que ayuden a estimular correctamente el lenguaje de los niños.

 

Tabla 7

¿Puede el niño comunicarse con fluidez con las personas de su entorno familiar?

 

Válidos

Frecuencia

Porcentaje

PorcentajeVálido

PorcentajeAcumulado

Si

 

No

 

A veces

 

Total

8

 

9

 

3

 

20

40,0

 

45,0

 

15,0

 

100,0

40,0

 

45,0

 

15,0

 

100,0

40,0

 

45,0

 

15,0

 

100,0

 

Fuente: Fichas de observación.

 

 

En la tabla 7 se puede evidenciar que 8 niños que equivalen al 40 % de la población de estudio sí se comunican en su entorno familiar, es decir, con sus padres, pero, por el contrario, 9 niños que corresponden al 45 % de la población de estudio no pueden comunicarse de forma clara con los miembros de su familia. Esto quiere decir que esta parte de la población necesita de actividades que les permitan desarrollar su lenguaje de una forma óptima, con el fin de ayudarlos a responder a las necesidades del entorno en el que se desenvuelven. Por otro lado, en la observación también se pudo evidenciar que el 15 % de la población, el cual equivale a 3 estudiantes solo a veces pueden comunicarse dentro de su entorno familiar, por lo tanto, es necesaria la estimulación para que puedan desarrollar sus capacidades de lenguaje.

 

Tabla 8

¿Imita el niño sonidos onomatopéyicos por sí solo?

 

Válidos

Frecuencia

Porcentaje

Porcentaje

Válido

Porcentaje

Acumulado

Si

 

No

 

A veces

 

Total

2

 

15

 

3

 

20

10,0

 

75,0

 

15,0

 

100,0

10,0

 

75,0

 

15,0

 

100,0

10,0

 

85,0

 

5,0

 

100,0

 

 

 

 

 

 

 

 

Fuente: Fichas de observación.

 

En la tabla 8 se evidencia que 2 estudiantes que equivalen al 10 % de la población logran emitir sonidos producidos por ellos mismos imitando los del entorno, es decir, que sí logran reproducir por sí solos los sonidos que escuchan, el 85 % que equivale a 15 estudiantes no pueden reproducir sonidos por si solos, por ello, necesitan de la estimulación para imitar los sonidos del entorno. Por otro lado, 3 estudiantes que equivalen al 5 % de la población de estudio solo a veces pueden imitar sonidos por sí solos, puesto que necesitan de estimulación para realizarlos.

 

 

 

 

 

 

Tabla 9.

¿Repite el niño sonidos onomatopéyicos al ser estimulado?

Válidos

Frecuencia

Porcentaje

PorcentajeVálido

PorcentajeAcumulado

Si

 

No

 

A veces

 

Total

4

 

10

 

6

 

20

20,0

 

50,0

 

30,0

 

100,0

20,0

 

50,0

 

30,0

 

100,0

20,0

 

50,0

 

30,0

 

100,0

 

 

Fuente: Fichas de observación.

 

 

En la tabla 9 se pone en evidencia que 10 estudiantes correspondientes al 50% de la población de estudio definitivamente no repiten los sonidos onomatopéyicos, puesto que estos sonidos poco se usan en el aula de clases para estimular su lenguaje. Por su parte, el 30 % de la población que equivale a 6 estudiantes solo a veces los repiten, debido a que no son muy reconocidos por ellos y se les dificulta poder repetirlos, en consecuencia, solo 4 estudiantes, es decir, el 20% de la población sí repiten los sonidos onomatopéyicos debido a la estimulación recibida en clase y en casa.

De acuerdo con el resultado expuesto, se puede dar respuesta al objetivo principal de este estudio, el cual se enfocó en emplear una serie de estrategias con sonidos onomatopéyicos para la estimulación del lenguaje oral en los estudiantes de educación inicial dentro del aula. Para tal fin, se seleccionaron algunos sonidos que fueron empleados en el aula para la práctica de los estudiantes y asignados como tarea para reforzarlos en casa; sin embargo, a pesar de la asesoría prestada en la sesión de clase y la ayuda en casa, se pudo percibir que sólo el 20% logró repetir los sonidos de forma óptima. Tal resultado conduce a concluir que poco se usan estrategias sustentadas en la onomatopeya.

Por este motivo, se sugiere que a partir de esta investigación, los docentes se motiven a diseñar una guía didáctica como material de apoyo indispensable en los procesos de enseñanza y aprendizaje, pues por medio de ella es posible organizar eficientemente los contenidos para facilitar la transferencia del conocimiento. Una guía debe estar fundamentada en los contenidos de los programas del curso y debe tomarse en consideración la experiencia, la práctica docente, y los ejes curriculares que contemplan los planes de estudios (Calvo, 2015, p. 5). Por consiguiente, la guía didáctica debe ser contentiva de estrategias con sonidos onomatopéyicos, por cuanto estas podrían contribuir a una mejor estimulación del lenguaje oral en los estudiantes, puesto que el docente contaría con un recurso valioso de actividades ya detalladas que lo orientaría a aplicar las más idóneas en la estimulación del lenguaje de cada estudiante dentro del nivel de educación inicial.

 

DISCUSIÓN

En atención a la investigación realizada acerca de la onomatopeya, cabe aclarar que la información encontrada en la web no es totalmente actual, algunos datos se encuentran de forma general y datan de años anteriores. En la búsqueda de bibliografía se resalta el poco abordaje acerca del uso de las onomatopeyas, no obstante, en la escasa información obtenida, se puede verificar la utilidad de ellas en el ámbito cultural y educativo.

En relación a la onomatopeya, se encuentran estudios que se relacionan con la presente investigación, como por ejemplo, el de los autores Ruiz y Motoki (2015), quienes basan su estudio en la singularidad de las onomatopeyas japonesas, manifestando que las mismas no se asocian necesariamente al lenguaje infantil por lo que se usan profusamente en multitud de ámbitos y géneros textuales (p. 48). Por su lado, (Vivanco, 2021, p. 254) expresa que “no cualquier intento de captación de so­nido es una onomatopeya, sino solo el que está acuñado y registrado, es decir, aquel cuya morfología se encuentra integrada en el acervo de un idioma”.

Al contrario de las aseveraciones de los autores antes mencionados, (Piaget, 1965) manifiesta que “el crecimiento posterior de los nervios y músculos en los niños, debe combinarse con la práctica para producir un repertorio de sonidos adecuados para hablar”. A su vez, (Bravo, 2016, p.52) manifiesta que “en primer lugar está el reconocimiento de los sonidos que componen el lenguaje oral de cada lengua, lo cual entendemos como conciencia fonológica”.

Este criterio es de relevancia, puesto que, para el efectivo desarrollo del lenguaje oral en los más pequeños, se debe iniciar por la una etapa lingüística en la que los sonidos juegan un papel importante y son la base primordial para que el infante logre adquirir un lenguaje fluido y sin complicaciones que puedan repercutir en situaciones futuras.

“Las onomatopeyas son una parte muy importante del lenguaje oral y escrito” (Salaya y Morales, 2017, p. 23). Cabe destacar que las onomatopeyas son tan poco estudiadas que hace unos años no eran realmente tomadas en cuenta en el desarrollo del lenguaje de los niños y es en la actualidad donde se rescata la verdadera importancia que tiene para el desarrollo del lenguaje oral de los más pequeños; por ende, es importante asumir que son estos sonidos los que nos permiten asociar las palabras con la realidad para así podernos comunicar.

Por los resultados obtenidos, se recomienda diseñar una guía didáctica a ser implementada a futuro por la institución educativa, toda vez que se persigue elevar los niveles de aprendizajes de acuerdo a las capacidades de cada niño, acompañado por el estímulo que es fundamental para una correcta pronunciación del lenguaje a través de los sonidos onomatopéyicos y con un vocabulario fluido que garantice un aprendizaje para la vida.

Además, se sugiere tomar en consideración la inclusión de actividades individuales y grupales para que el niño, mediante la acción y la estimulación, pueda adquirir un lenguaje fluido que le permita desenvolverse ante los demás.

 

CONCLUSIÓN

Con base en los resultados obtenidos mediante entrevista realizada a la docente de educación inicial como ente principal de la enseñanza – aprendizaje de los estudiantes, se determinó que poco aplica recursos o herramientas necesarias para cubrir las necesidades educativas siendo imposible lograr que los niños puedan sumergirse en un ambiente en el que puedan adquirir mayor desempeño de sus capacidades de lenguaje.

En efecto, al aplicar la ficha de observación se denota que los estudiantes no poseen un lenguaje oral fluido, manteniendo poca comunicación con la docente y con los de su entorno, lo que conlleva a que los niños no puedan desenvolverse de una manera adecuada dentro del lugar en el cual se desarrollan. Cabe mencionar que si no se utilizan recursos apropiados, no se logrará un lenguaje que permita al niño comunicarse de manera óptima y sin limitaciones.    

Por tal razón, se recomienda diseñar una guía didáctica como herramienta importante que pueda ser utilizada de manera oportuna para propiciar el desarrollo del lenguaje oral de los niños y, de ser necesario, la docente podrá aumentar los niveles de aprendizaje según el requerimiento de cada uno. Cabe destacar que si el lenguaje es bien estimulado, permitirá alcanzar un vocabulario más fluido e interactivo con los demás miembros del entorno.

 

FINANCIAMIENTO

No monetario.

 

 

AGRADECIMIENTO

A todos los actores sociales involucrados en el impulso y desarrollo de la investigación.

 

 

REFERENCIAS CONSULTADAS

 

Bravo Valdivieso, L. (2016). El aprendizaje del lenguaje escrito y las ciencias de la lectura. [Learning written language and sciences of reading]. LÍMITE Revista Interdisciplinaria De Filosofía Y Psicología11(36), 50-59 https://revistalimite.uta.cl/index.php/limite/article/view/60

 

Bermúdez G., José Á., García Z. J. C., (2016) El lenguaje como problema en la investigación socio-educativa. [The language as a problem in socio-educational research]. Sophia. Colección de Filosofía de la Educación, 20, 139-159 https://www.redalyc.org/pdf/4418/441846839006.pdf

 

Carvajal, G. S. E., (2016), El aprendizaje del lenguaje y los saberes necesarios para la educación de hoy.  [Learning the language and required knowledge for the education of today]. Sophia, Colección de Filosofía de la Educación, 20, 179-196 https://www.redalyc.org/pdf/4418/441846839008.pdf

 

Calvo, L. (2015) Desarrollo de guías didácticas con herramientas colaborativas para cursos de bibliotecología y ciencias de la información. [Development of teaching guides using collaborative tools in Library and Information Science courses]. Revista e-Ciencias de la Información, 5 (1), 1-17. https://www.redalyc.org/pdf/4768/476847247009.pdf 

 

Coello, V. M. C., (2021). Estimulación temprana y desarrollo de habilidades del lenguaje: Neuroeducación en la educación inicial en Ecuador. [Early stimulation and development of language skills: Neuroeducation in initial education in Ecuador]. Revista De Ciencias Sociales27(4), 309-326. https://doi.org/10.31876/rcs.v27i4.37257

 

Congo, M. R., Bastidas, A., Santiesteban S. I., (2018). Algunas consideraciones sobre la relación pensamiento – lenguaje. [Some considerations on the relation thought - language].  Revista Conrado, 14  (61), 155 – 160. https://www.redalyc.org/pdf/4418/441846839006.pdf

 

 

Dastpak, Mehdi; Bejat, Fatemeh; Taginezhad, Ali (2017) Un estudio comparativo de las perspectivas de Vygotsky sobre el desarrollo del lenguaje infantil con el nativismo y el conductismo. [A comparative study of Vygotsky's perspectives on child language development with nativism and behaviorism]. Presentación en línea, Revista Internacional de Educación y Enseñanza de Idiomas 5 (2) 230-238. https://eric.ed.gov/?id=ED574953

 

Delgado V. A. O., Muñagorri S. E., Batista G. R. M., (2017) Alternativa pedagógica para la estimulación del lenguaje y la comunicación en la educación preescolar. [Pedagogical alternative for the stimulation of language and communication in pre-school education]. Revista Cognosis 2 (2) p. 25-38 DOI: https://doi.org/10.33936/cognosis.v2i2.774

 

Giraldo, G. F. L., Londoño, V. D. A.,  (2017) El lenguaje como posibilidad de veracidad. Un asunto de límites de sistemas-mundo y actos de habla. [Language as a Possibility for Veracity. A Matter of World-System Limits and Speech Acts]. Cuadernos de Lingüística Hispánica, 29, 163 – 178.

 

Hoyos, G., (2015). Las onomatopeyas y su incidencia en el lenguaje oral de los niños y niñas de 4 a 5 años de los paralelos “A” y “B” de la Unidad Educativa “Francisco Flor – Gustavo Egüez” del cantón Ambato de la provincia Tungurahua. [The onomatopoeias and their incidence in the 4 to 5 years old children’s oral language of the "A" and "B" parallel at "Francisco Flor - Gustavo Egüez" Educational Unit in Ambato canton, Tungurahua province]. Ambato, Ecuador: Universidad Técnica de Ambato.

 

Manzano, A, D., Alemany, A, I. (2017) Análisis de las habilidades lingüísticas en educación infantil y primaria en un contexto multicultural. [Psycholinguistic skill analysis in early childhood and primary education inside a multicultural context]. Revista de Currículum y Formación de Profesorado, 21 (2), 309-329 https://www.redalyc.org/articulo.oa?id=56752038017 

 

Martínez, C. A. C., Tocto, T.C., Palacios, L. L. G. (2015) La expresión oral en los niños y los cuentos UCV-HACER. [Oral expression in children and tales]. Revista de Investigación y Cultura,4 (2), 116-120. https://www.redalyc.org/pdf/5217/521751974012.pdf

 

 

 

 

Méndez, M. M., Vega, B. Y., Labrada, P.M., (2018). El desarrollo de la expresión oral de escolares con retraso mental leve a través de cuentos. [The development of oral expression of students with slight mental retardation through tales]. Roca: Revista Científico - Educaciones de la provincia de Granma,  14,  (1 ), 192-204. https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=6759683

 

Moreno, J. (2016) Onomatopeya, Delocutividad y Fonosimbolismo en la Ornitonimia Latinoamericana. [Onomatopoeia, delocutivity and sound–symbolism in latin american ornithonymy]. Revista Liburna 9, 2016, 117-166. https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=5774907 

 

Morán, A, M. R., Vera, M. L. Y., & Morán, F. M. R., (2017). Los trastornos del lenguaje y las Necesidades Educativas Especiales. Consideraciones para la atención en la escuela. [The disorders of the language and the educational special needs. Considerations for the attention in the school]. Universidad y Sociedad, 9(2), 191-197.  http://rus.ucf.edu.cu/index.php/rus

 

Ospina, S., Gallego, A. (2014). Lenguaje y Socialización en la Primera Infancia: propuesta didáctica para leer y escribir. [Language and socialization in early childhood: methodological approach to literacy]. Katharsis: Revista de Ciencias Sociales, 17, 95-113. https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=5527459 

 

Ortiz, D. (2020). Estrategias tecnológicas caseras con onomatopeyas en la educación especial en niños de preescolar con retraso el lenguaje. [Homemade technological strategies with  onomatopoeia  in special education in preschool children with language delay]. Revista Conrado, 16(S1), 212-222. https://conrado.ucf.edu.cu/index.php/conrado/article/view/1543/1527

 

Ortiz, D, D. C., Ruperti L, E. M., Cortez Moran, M. E., & Varas Santafé, A. C. (2021). Lenguaje y comunicación componentes importantes para el desarrollo del bienestar infantil. [Language and communication as important components forVthe development of childhood well-being]. Horizontes. Revista De Investigación En Ciencias De La Educación4(16), 450–460. https://doi.org/10.33996/revistahorizontes.v4i16.128

 

Pérez R.G V., Carvajal V. Y. M., Guio, M. L. M. (2017). Aplicación de herramientas de la comunicación y sistemas de comunicación en el lenguaje. [Application of communication tools and communication systems in language]. Revista Signos Fónicos 3(2), 63-82 https://revistas.unipamplona.edu.co/ojs_viceinves/index.php/CDH/article/view/2916.

 

Piaget, J. (1965). El lenguaje y el pensamiento del niño pequeño. [Language and thought of the child]. Buenos Aires: Paidós.

 

Real Academia Española: Diccionario de la lengua española. [Royal Spanish Academy: Dictionary of the Spanish language] 23.ª ed., [versión 23.5 en línea].  https://dle.rae.es/onomatopeya [marzo 2022].

 

Rocha, M, R. (2020). Geech: Onomatopeya y cognición en el quechua central. [Geech: Onomatopoeia and cognition in central quechua]. Letras (Lima)91(134), 74-96. https://dx.doi.org/10.30920/letras.91.134.4

 

Ruiz, M. D., Motoki, C., (2015) La singularidad de la onomatopeya japonesa en la lengua traducida y no traducida, [The uniqueness of Japanese onomatopoeias in translation and non-translation]. Metodologías y aplicaciones en la investigación en traducción e interpretación con corpus  47-62. https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=5334707

 

Salaya, C. C., Morales, E. (2017). Interpretación y Representación de las Onomatopeyas en el Lenguaje Escrito al Momento de Traducir. [nterpretation and Representation of Onomatopoeias in the Written Language when Translating]. Revista Perspectivas Docentes 28 (65), 15-20. https://revistas.ujat.mx/index.php/perspectivas/article/view/2301

 

Scotto, S. C., (2020). El lenguaje humano: ¿una estructura más un código o un sistema dinámico, multimodal y semióticamente heterogéneo? [Human language: a structure plus a code or a dynamic, multimodal and semiotically Heterogeneous system?].  Análisis. Revista de investigación filosófica 7, (1) 3-29 DOI: https://doi.org/10.26754/ojs_arif/a.rif.202013494

 

Urgilés, C. G., (2016). Aula, Lenguaje y Educación. [Classroom, language and education]. Sophia, Colección de Filosofía de la Educación, 20, 221-244. https://www.redalyc.org/articulo.oa?id=441846839010

 

Yépez E. R., Padilla Á. G. C., (2021) La oralidad y las dimensiones del lenguaje en los infantes. [Orality and language dimensions in children]. Revista Cognosis, 6, 1-22 DOI: https://doi.org/10.33936/cognosis.v6i0.1973

 

Yun, Q., (2016) Onomatopeyas del chino moderno Araucaria. [Onomatopoeia in Modern Chinese]. Revista Iberoamericana de Filosofía, Política y Humanidades, 18 (35), 217-229. https://www.redalyc.org/pdf/282/28245351011.pdf.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

©2022 por los autores. Este artículo es de acceso abierto y distribuido según los términos y condiciones de la licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional (CC BY-NC-SA 4.0) (https://creativecommons.org/licenses/by-nc-sa/4.0/)